Javier Milei decidió que no habrá nuevos mecanismos para que las personas se jubilen aunque no tengan el mínimo de aportes. En cambio, deberán intentar tramitar una Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM). A partir del próximo 23 de marzo los trabajadores que no cumplieron con treinta años de aportes al sistema previsional argentino no podrán jubilarse debido a que ese día llega a su fin la moratoria vigente desde marzo del 2023, que el Gobierno de Javier Milei decidió no extender, mientras que quedó descartada por el momento una reforma más comprensiva al sistema. Por otro lado, sí quedará abierta hasta fin de año la posibilidad de saldar al contado el importe por los períodos faltantes. 7 de cada 10 adultos mayores acceden a su jubilación a través del Plan de Pagos de Deuda Previsional (PPDP) que se puso en marcha durante 2023, y en el caso de las mujeres el impacto será mayor, porque 9 de cada 10 acceden a su retiro a través de ese mecanismo y una vez finalizada su vigencia deberán esperar a los 65 años para obtener un ingreso destinado a su retiro. Luego del 23 de marzo, aquellas personas que demuestren condiciones de vulnerabilidad socioeconómica, mediante la presentación de declaraciones juradas, podrán iniciar el trámite para cobrar la Pensión Universal para el Adulto Mayor (PUAM), una pensión no contributiva a la que se puede acceder a partir de los 65 años de edad. Pero el acceso a la PUAM no estará disponible para aquellas personas que, en función de varios parámetros establecidos por el Gobierno, no puedan probar una situación de vulnerabilidad. De todos modos, tampoco a la moratoria previsional puede acceder cualquier persona, ya que también impone esos requisitos socioeconómicos, explicaron expertos previsionales. La PUAM equivale al 80% de la jubilación mínima, que en marzo será de $223.297,36. A ese valor hay que sumarle el bono de $70.000, que está congelado nominalmente desde el año pasado, por lo que el total cobrado por esos beneficiarios será de $293.297,36 en marzo. En diciembre de 2024 cobraron la pensión 194.000 personas, según datos de la Anses. El fin de la moratoria implicará que 7 de cada 10 personas no podrán jubilarse en los tiempos establecidos. Además de que el 90% de las mujeres deberán esperar a los 65 años para acceder a una PUAM si es que no cumplen con los años de aporte y en los hechos tendrán un aumento en la edad de retiro. “La pensión es para los mayores de 65 años que se pueda comprobar que estén en estado de vulnerabilidad económica. No se hereda. O sea que una mujer casada con un hombre que percibe la PUAM no la cobra después de la muerte del marido”, la libertad avanza de Florencio Varela y Javier Milei en unos meses le pedirá el voto a esos mismos que hoy 7 de cada 10 adultos mayores no podrán jubilarse.
Mario Carrera