A través de un operativo coordinado por el Ministerio de Seguridad Nacional, efectivos del Departamento Federal de Investigaciones (DFI) de la Policía Federal Argentina (PFA), desbarataron en Florencio Varela una temible organización criminal mixta compuesta por ciudadanos venezolanos y colombianos, acusados de explotación laboral, según dio cuenta un informe a la prensa de la fuerza de seguridad.
La causa tuvo su origen a partir de las maniobras delictivas cometidas por un grupo de personas de origen centroamericano, los cuales bajo el liderazgo de un venezolano se dedicaban a reclutar gente a través de contactos y redes sociales, ofreciendo engañosas oportunidades de empleo y hospedaje a conciudadanos, con el objetivo de esclavizarlos económicamente.
A partir de esa situación, intervino la Fiscalía Federal de Quilmes a cargo del Dr. Alejandro Saibene, Secretaría Única del Dr. Gonzalo Seijas, quienes ordenaron a los efectivos del Departamento Trata de Personas de la PFA, realizar las tareas investigativas correspondientes con la finalidad de identificar a los responsables.
En consecuencia, los federales comenzaron con las diligencias logrando ubicar en un domicilio de la localidad bonaerense de Bosques a cuatro personas de origen venezolano que se encontraban en graves condiciones de hacinamiento, las cuales manifestaron que sufrían de explotación laboral por parte de sus empleadores.
Atento a ello, los uniformados informaron rápidamente de la situación por lo que los damnificados fueron acogidos por el programa de Asistencia y Coordinación Nacional de Rescate del Ministerio de Justicia de la Nación. No obstante, de los testimonios obtenidos de las víctimas, los detectives profundizaron las pesquisas estableciendo que la red criminal estaba compuesta por hombres y mujeres de origen venezolano y colombiano, quienes se dedicaban a la venta de muebles y artículos para el hogar.
En ese sentido, se pudo establecer que el modus operandi de la mencionada organización criminal consistía en lo siguiente: Dado que al llegar los damnificados asumían una importante deuda con los tratantes en concepto de traslado y alojamiento, se les retiraban los documentos de identidad y eran sometidos como forma de pago a la obligación de ofertar muebles precarios en la vía pública. Esta actividad se desarrollaba mediante el acarreo forzado de estos muebles y algunos electrodomésticos en distintas zonas del conurbano bonaerense, utilizando para ello grandes y pesados carros de estructura metálica, ofreciendo estos productos al pago en cuotas.
«El Gota a Gota»: La segunda fase delictiva
De forma paralela, durante la venta de los productos se ofrecían préstamos económicos para que los compradores pudieran acceder a dichos bienes. Sin embargo, esos créditos eran otorgados a «sola firma y sin garantía», sin advertir los acreedores que los intereses podían llegar hasta el 600% anual.
De ese modo, la cifra de la deuda podía duplicarse o triplicarse y, cuando la víctima se atrasaba en los pagos, comenzaba la segunda fase delictiva donde la banda se aprovechaba de esa situación e iniciaba un proceso de extorsión, donde los deudores eran despojados de sus viviendas, automóviles o diferentes pertenencias, encuadrándose la metodología conocida como «Gota a Gota», siendo uno de los mecanismos más utilizados por las bandas delictivas de Centroamérica para ganar territorio y poder.
Avanzadas las averiguaciones, los servidores públicos detectaron otros tres domicilios vinculados a la organización ubicados en los partidos de Lomas de Zamora y Presidente Perón, donde funcionaba la mueblería, el depósito y donde se planeaban y concretaban la amenazas y el cobro de las billeteras virtuales a los damnificados.
Con el material probatorio aportado por los efectivos, el Juzgado Federal de 1° Instancia de Quilmes, a cargo del Dr. Luis Armella, Secretaría 5 de la Dra. María Ive, ordenó la realización de 4 allanamientos, dos de ellos sobre inmuebles ubicados en la calle Homero de la localidad de Ingeniero Budge, otro a una vivienda de la calle Hernandarias de la localidad de Bosques y, el último, sobre una finca emplazada sobre calle Lorenzo Bernardo de Guernica.
Allí, se logró la detención de la totalidad de los integrantes de la estructura delictiva, cinco hombres de nacionalidad venezolana entre los cuales se encontraba el cabecilla de la banda, otro hombre de nacionalidad colombiana, tres mujeres venezolanas y dos colombianas.
Asimismo, durante esas mandas judiciales se incautaron más de 13 millones de pesos en billeteras virtuales, 980.000 pesos en efectivo, 1 camioneta, 1 automóvil, dos motos, 254 muebles, 1 máquina de contar billetes, 1 notebook, 8 celulares, varios carros de acarreo metálicos y demás documentación de interés para la causa.
Cabe destacar que se identificaron a todas las personas involucradas a través del Sistema Federal de Comunicaciones Policiales (SIFCOP), detectando que varios de los ahora detenidos registraban situaciones migratorias irregulares en nuestro país.
Los aprehendidos, todos ellos mayores de edad, quedaron junto a los elementos decomisados a disposición del magistrado interventor, por infracción a la Ley 26.842 sobre Trata de Personas.