En el marco de un domingo excepcional se realizo la 25º edición del Matsuri, tradicional propuesta de la Asociación Japonesa en nuestro distrito, en el predio ubicado sobre Av. Eva Perón N°7215, donde el público exploró la idiosincrasia oriental, apreció danzas típicas y degustó las mejores comidas propias de aquella región.
Como todos los años el titular en el Ejecutivo local, Andrés Watson, bregó desde el escenario por «continuar la labor hermanada a fin de potenciar el intercambio de culturas y fortalecer los lazos de generación en generación».
El embajador extraordinario plenipotenciario de Japón en Argentina – Yamauchi Hiroshi- remarcó el respaldo de las autoridades comunales a la actividad. «Sin su apoyo no era posible compartir en familia este colorido evento», expresó quien mostró su sorpresa en los diversos festivales «por ver a los amigos argentinos disfrutar tanto como nosotros».
Por su parte, el presidente de la institución anfitriona -Fernando Uehara- indicó la relevancia de la fecha al «conmemorar el 125º aniversario de las relaciones diplomáticas entre ambas naciones». Por otra parte, agradeció al Mandatario por declarar de Interés Municipal el encuentro.
Paula Nerome llegó desde Capital Federal con su emprendimiento «Kami» de joyería en origami vitrificado. «Collares, aritos, todo con motivos de la naturaleza nipona, colibríes, grullas, búhos, godzillas como animales icónicos», describió acerca de la oferta. «Maravillosa festividad; de las que asistí, una de las más convocantes», aseguró.
Cristina Canebari vino desde Quilmes junto a su esposo. Mientras él paseaba por el vivero, ella lo esperaba en una de las mesas dispuestas en el lugar. La mujer reveló «venir siempre, más de veinte años». Como en cada oportunidad, con su «tupper listo para guardar fideos udon hasta llegar a casa». También, señaló como parada obligada «algún stand de animé donde comprarle algo a mi nieta». «Un ambiente hermoso», concluyó.
De una pensión universitaria en La Plata, la varelense Ayumi Kawada junto a sus compañeros de residencia concurrió al espacio gastronómico donde presentó su Yakimeshi -salteado de arroz con verduras y huevo-. Además, ofrecieron a los y las visitantes galletas de la fortuna y dulces. «Una experiencia laboral, pero también una ocasión de conocer gente», aseveró.
Además de puestos culinarios, artesanías, floricultura y regalería, la feria contó con un amplio sitio destinado tanto a muestras como talleres participativos. Dentro de la grilla, hubo exhibiciones de karate, seminarios de shiatsu, aikido y concursos de dibujo.
En el escenario central, una variada gama de artistas fueron parte del programa, con la actuación especial de la cantante de nivel internacional Anna Saeki.
Estipularon donar lo recaudado a la Escuela Agraria Nº1 de La Capilla.