Con Milei los jubilados pierden 21% de sus ingresos en comparación con la fórmula anterior, que él derogó por decreto. El Gobierno celebró el aumento de haberes jubilatorios con la fórmula actual, pero los datos de Indec muestran que jubilados pierden poder adquisitivo. Con el DNU 274/24, los haberes serán en diciembre 21% menores que con la fórmula anterior, mientras el congelamiento del bono profundiza el ajuste previsional.
De haberse actualizado en la misma proporción, el bono debiera ser en diciembre de $135.140, prácticamente el doble de lo que efectivamente percibirán los jubilados, con una pérdida real de casi el 50%. Así, a los jubilados y pensionados de la Argentina les niegan por mes $65.140. En el presupuesto 2025, se prevé el congelamiento del bono en una suma fija de $70.000, continuando así con la política de licuación sobre los de más abajo. En suma, entre la fórmula impuesta por el DNU 274/24 y el congelamiento del bono, las jubilaciones y pensiones continúan siendo el principal factor explicativo en el ajuste efectuado por el Gobierno. A septiembre, último dato disponible, constituyen el 25,3% del recorte de gasto que hicieron Milei y Caputo. Si el Congreso ratifica el DNU 274/24 (cuestión incluida en el proyecto de presupuesto 2025 del Ejecutivo), y la inflación se mantiene en estos guarismos, las jubilaciones ya no perderán, pero tampoco tendrán la posibilidad de recuperar poder adquisitivo. Por el contrario, la Ley 27.756 que este año sancionó el Congreso pero fue vetada por el Ejecutivo incluía una recomposición por única vez de 7,2% para todos los haberes y un haber mínimo equivalente al 109% de la CBT (Canasta Básica Total, un indicador económico utilizado por el Indec para medir el costo de una canasta que incluye bienes y servicios esenciales para satisfacer las necesidades básicas de una familia o individuo, y que define si se es pobre o no) de un adulto, que hubiera impedido la licuación del bono. A su vez, permitía en el mediano plazo una mejora progresiva en los haberes si la economía crecía, ya que contaba con una cláusula gatillo en marzo de cada año, que se activaba sólo en caso de que en el año calendario anterior, los salarios le hayan ganado a la inflación. Sin embargo, el oficialismo eligió el camino del ajuste: sostener el superávit a costa de jubilados y jubiladas. Con los datos publicados por Indec, se confirmó una vez más esta situación. En septiembre de 2024, las jubilaciones hubieran aumentado 33,4%, si Milei no hubiera derogado la fórmula por decreto. La motosierra de la Libertad Avanza no tiene piedad con los jubilados y los pensionados, después de aportar más de treinta años tienen una jubilación que los sumerge en la indigencia. No hay justicia social, no hay medicamentos, salud, trabajo y lo peor de todo. Está dejando a millones de argentinos sin esperanza, y como si todo esto fuera poco por decreto los jubilados pierden el 21%.
Mario Carrera