(Por Dr Sattar Jamshidpour)
En 1973 el líder de la revolución cubana dijo: “Estados Unidos vendrá a dialogar con nosotros cuando tenga un presidente negro y haya en el mundo un Papá latinoamericano”. Esa predicción se cumplió el 13 de marzo de 2013, cuando el humo blanco y la frase Habemus papum en latin (Tenemos Papá) anunció que el argentino Jorge Mario Bergoglio era el nuevo líder católico mundial. El por su tendencia franciscana, eligió Francisco.
En la elección del Papa, 120 cardenales en su momento analizaron minuciosamente quién era el apropiado para el puesto papal. Estos cardinales aislados y sin comunicación con el mundo exterior, en el segundo día de Cónclave eligieron al hombre indicado para liderar la iglesia católica.
El ex papa Benedicto XVI había renunciado. A él, lo consideraban como un conservador sin carisma. Y, previo a él, Juan Pablo II estaba a cargo de liderar a los católicos.
Desde ya, los votantes sabían que los fieles estaban descontentos con las actitudes de la cúpula de la iglesia católica.
Algunos sacerdotes con acusaciones de pedofilia, abuso sexual, mirada discriminatoria hacia las minorías sexuales e ideologías poco sensibles a los suntos sociales. Necesitaban a alguien progresista.
Era muy poco frecuente que un papa se someta tanto en asuntos políticos, sociales, medioambientales y económicos, como lo hizo el Papa Francisco. Por eso mismo, algunas de sus actitudes despertaron el enojo del sector conservador del Vaticano.
Su meta era reformar para que los fieles vuelvan a tener confianza.
Las iglesias cada vez más vacías, los asientos vacíos en las misas de la mismísima Basílica San Pedro en el Vaticano hablaban claro.
Él se animó a hablar de los derechos de los homosexuales, algo sin precedente.
Defendió a los inmigrantes y los pobres (organizó un almuerzo con 1300 pobres).
Pidió orar por la paz y no olvidar a los pueblos martirizados por las guerras.
Por supuesto, él era consciente que con sus actitudes compraría innumerables enemigos dentro del Vaticano. Una vertiente de sacerdotes a través de redes sociales solicitando defensa de la tradición católica.
El Lunes 21 de Abril, el Papa Francisco de 88 años falleció luego de una larga enfermedad. ¿Quién será el nuevo papá? Es una lotería apostar quién es el elegido. Los candidatos son muchos. Depende de los votantes qué bajada de línea quieren para los católicos después del Papa Francisco.
El mundo ha cambiado y el Papá Francisco lo entendió a la perfección. Así, comenzó con su iniciativa cambiar y poner a la iglesia a la altura de las circunstancias.
La llegada de un conservador sería viajar a la edad media. Un moderado estará entre la presión de los conservadores y los progresistas.
Para el bien de la iglesia católica, lo ideal sería seguir con los objetivos del Papa Francisco. Cuando los cardenales de todo el mundo se aíslen en soledad, decidirán el rumbo del catolicismo mundial.
Se fue el Papá Francisco, rebelde, convencido de sus convicciones aprendió de su profeta Jesús Cristo. Falleció el máximo orgullo de los argentinos.
Papa Francisco
25/04/2025