Una comisión generada en forma inconsulta por las autoridades del establecimiento e integrada por docentes. El incremento del 5% en la cuota encendió la protesta de los padres.

A las 11:00 horas de ayer, autoridades del Instituto San Juan Bautista comunicaron el fin de la flamante «Unión de Padres», surgida en circunstancias no precisas el mes pasado, y que inquietó a la comunidad educativa del establecimiento, a partir de los primeros días de mayo, cuando la iniciativa llegó en la factura que abonan los padres, a un costo del 5 por ciento del valor de la cuota, de manera sorpresiva, inconsulta y con insuficiente información de sus fines.
Cabe recordar que la «Unión de Padres» -según dio cuenta el padre de un alumno a este medio-, nació a través de un flyer que indicaba que cuatro docentes del colegio que tienen hijos en el mismo, anunciaron que conformaban una comisión para ayudar a los estudiantes.
Sin mayores detalles ni novedades, la idea continuó su camino hasta los primeros días de este mes, cuando empezaron distribuirse las boletas de pago de la cuota mensual, en la que se incorporó un concepto «Unión de Padres», por un valor del 5 por ciento de la cuota.
Desde entonces, se multiplicaron los pedidos de reunión, los mails, los mensajes a medios de comunicación y las consultas a docentes exigiendo explicaciones a lo que se suponía era sólo una iniciativa no lucrativa a favor del estudiantado. Lo mismo sucedió con la falta de respuestas.
Tras la publicación que hiciera Varela al Día de la carta de un padre contando lo vivido en el interior del colegio, la «comisión de padres» emitió su primer informe en el que más que responder a los padres, intentó echar luz a lo expresado en las páginas de este medio, dando cuenta de algunos de sus objetivos y de cómo sería el proceder con el dinero.
Ya era tarde: a los padres, primero les cobraron, sin que pudieran conocer claramente de qué se trataba la iniciativa.
El desencuentro, en un contexto de baja credibilidad de las instituciones con exigencia de transparencia, selló la suerte de la «Unión de Padres»: otra vez sin utilizar el cuaderno oficial de comunicaciones, ayer se consignó el fin del cuarteto de docentes unidos; y el reintegro del dinero abonado.
Debido a los reiterados reclamos de algunos padres», aducen en el flyer publicado ayer en la cuenta de Instagram del Colegio, se devolverá el dinero. Según trascendió, las protestas se habrían materializado mediante el no pago de la cuota del mes por parte de un número indeterminado de jefes de familia.
Es decir, en vez de profundizar las explicaciones que ameritaban al caso, se decidió poner fin a la nueva organización.
La comunicación aparecida en la víspera, además añade otra información poco clara: «continuaremos trabajando por y para los alumnos desde otro lugar» («¿se van del colegio?», se preguntó un padre).
Pero en esta ocasión, en la gráfica aparece una firma que podría ser responsable de lo sucedido: «la representación legal».
El fin de la «Unión de (docentes) Padres» no pasó desapercibida en los diversos grupos de whatsapp de padres: hubo satisfacción pero también inquietud de cara al futuro por las materias pendientes que tiene la institución con los alumnos.
Es conocida en la comunidad educativa la demanda de mejoras en las aulas, baños y en el espacio para la práctica de educación física, realizada en un predio sin techar.

Oído:
«Se hizo justicia, no te pueden sacar plata sin explicar claramente el destino, aunque sea exigua la cifra». «Y mucho menos en el contexto económico actual».
«Es raro lo que pasó: se dio por finalizado algo que no terminó de nacer y quizá era bueno porque la escuela tiene carencias que deben superarse».
«Tendrían que haberle encargado la tarea de informar la propuesta a los chicos del secundario que tienen como materia comunicación. Hubiera sido un gran trabajo práctico a favor de todos».
«Deben explicar mejor lo que hacen. A mí no me explican por qué no ponen suplentes ante tanta falta de docentes. A pocos días de empezar las clases, se casó la profesora de lengua. Seguro lo avisó antes y, así y todo, no se molestaron en buscar alguien que la suplante. Es sólo un ejemplo de muchos». «Reinan los chicos deambulando por las horas libres».
«Fue un poco soberbio todo, se eligió dar de baja a la comisión en vez de explicar bien lo que pasó. Muy raro todo».