(Agencia La Barriada) El 14 de diciembre del 2018 el Concejo Deliberante de Florencio Varela le otorgó 10 años más de concesión a la empresa San Juan Bautista S.A., heredera de la vieja Treinta de Agosto S.A. (TASA), que no solo ha hecho efectiva la herencia de un paupérrimo servicio sino, también, el ejercicio de un manejo monopólico del transporte público local.
Sin dudas, los concejales actúan así porque no viajan en colectivo y porque no tienen idea lo que es tomar uno en las horas pico ni esperar un día de lluvia a cualquiera de los nueve ramales de «la 500», San Juan Bautista, que (al ser monopólica) cuenta con las únicas unidades que recorren los barrios varelenses.
Cuando se le otorgó el monopolio de nueve ramales exclusivos se creó una Comisión de Seguimiento que, entre otros; integraban Carlos Boco (candidato de Juntos y actual concejal) y Antonio «Tony» Suárez (actual concejal). Esa Comisión resultó un fiasco porque nos preguntamos: ¿qué control ejercieron?, ¿qué sanciones solicitaron, a la compañía, por no garantizar un servicio adecuado?. Tenemos la respuesta: ¡ninguno!, ¡nada de nada, hasta ahora!.
Para sorpresa de nuestro pueblo (y como si no fuera suficiente con el justo hartazgo de viajar, a diario, «como vacas hacia un matadero») en la octava sesión del Honorable Concejo Deliberante (HCD) se aceptó la donación de un viejo colectivo del año 2008. Un «regalo» de parte de la San Juan Bautista al municipio: ¡toda una burla hacia los miles de usuarios que sufren, día a día, su nefasto servicio!.
Dos de los concejales que festejaron la «donación» fueron David Marconi y Antonio Suárez. Los mismos se deshicieron en halagos destacando la utilidad que tendrá para la comunidad «tal acontecimiento, tamaño acto de solidaridad». Asimismo hicieron hincapié en «el gesto de confianza que representa esto para el gobierno municipal».
¡Los que no controlan aplauden, y ovacionan, a un añejo colectivo!. ¡Son una muestra patética de la tarea inoperante que ejecuta el HCD!.
Los varelenses precisamos terminar con décadas de exclusividad, y acaparamiento, en el transporte público local porque hace más de 40 años que para ir al Barrio Pico de Oro, solo por citar un ejemplo, existe un único ramal perteneciente a una única empresa. Y esto no puede seguir sucediendo. ¿Hasta cuándo?.
¿En serio los concejales de esta ciudad creen que aceptar un viejo colectivo del año 2008 es un logro para la comunidad?, ¿de verdad piensan que mantener el monopolio brinda un mejor servicio?.
Es una vergüenza guardar silencio cómplice frente al aborrecible servicio de la San Juan Bautista y, peor aún, aceptar el viejo colectivo. Entonces, ¿los concejales son ineficientes o son corruptos?, ¿o ambas cosas?.
No caben dudas que para esos interrogantes también ya tenemos las respuestas: ¡Varela no puede seguir tolerando esta prestación espantosa que tiene de rehenes a la mayoría de las familias y trabajadores/ as de nuestro distrito.