El jefe de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) Quilmes, Luis Alberto Zaracho, detenido acusado de encubrir el crimen de Lautaro Morello y la desaparición de Lucas Escalante, en diciembre pasado en Florencio Varela, fue liberado debido a que el delito que se le imputa es excarcelable, aunque seguirá ligado a la investigación, informaron fuentes judiciales.
La medida fue dispuesta por el juez de Garantías Julián Busteros, quien además resolvió denegar un pedido de arresto domiciliario formulado por otro de los policías detenidos, el comisario Sergio Enrique Argañaraz, titular de la comisaría de Bosques, quien alegó sufrir diabetes crónica.

En este caso, explicaron los informantes, el magistrado no accedió al pedido debido a que la situación procesal es más compleja, porque él fue quien actuó como preventor en los primeros días de la investigación por la desaparición de los amigos estuvo al frente de dos allanamientos de urgencia en dos comisarías que no fueron debidamente requisadas y entregó la vivienda al detenido Cristian Centurión cuando todavía no había concluido el procedimiento de requisa.

Tras conocer la liberación de Zaracho, familiares de Escalante y Morello anunciaron que realizarían una manifestación en repudio en la puerta del Juzgado de Garantías de Florencio Varela el viernes pasado desde las 11, bajo la consigna «queremos justicia ya». La manifestación se extendió por más de 5 horas y contó con un escrache nunca antes visto en Florencio Varela y asi lo indican las fotos. Sucedió en el inmueble de la calle Mitre entre Pringles y Brown
«Por favor, hoy me siento morir» escribió en las redes sociales Fanni Morello, la mamá de Lautaro, el joven de Florencio Varela asesinado cuyo cadáver fue arrojado en un descampado semicalcinado. Su amigo, Lucas Escalante, lleva más de cinco meses sin aparecer.
Fanni se encadenó a una reja del Juzgado para manifestar su indignación.