La noticia llegó a este diario el sábado por la tarde y daba cuenta que 24 horas antes, el viernes, al cierre de la jornada laboral de la Tesorería Municipal, como resultado de una investigación, fueron puestos en disponibilidad al menos 4 empleados del área y otros 4 directamente fueron suspendidos. La versión indicaba un presunto hecho de malversación de fondos públicos con pagos irregulares a empelados del área de tránsito. De inmediato hicimos la consulta a la Secretaria de Economía, Gisella Primus, quien en la edición del viernes había asegurado que el municipio está pasando una grave crisis financiera. La funcionaria respondió tres horas más tarde, que el municipio emitiría un comunicado. El mismo llegó a todos los medios y dice:
El Ejecutivo local identificó anomalías en sectores de cobranza bajo su órbita durante un relevamiento de rutina e inmediatamente inició acciones penales y sumariales correspondientes en resguardo del erario público.
El hecho fue denunciado y tomó intervención la Fiscalía de Instrucción Nº 1 a cargo del Dr. Darío Provisionato. Las autoridades procedieron con la debida investigación interna.