El prófugo mató a su hijastra de 19 años y apuñaló a su pareja. La Policía Bonaerense pide información para encontrar al sospechoso.
Una joven de 19 años fue asesinada a puñaladas el jueves pasado y su madre resultó herida en una humilde casa del barrio El Parque de Ingeniero Allan, en la zona sur de Florencio Varela. Por el femicidio buscan al padrastro de la chica fallecida y pareja de la mujer herida, según informaron fuentes policiales.
El hecho ocurrió alrededor de las 5, en una vivienda de un barrio humilde y de calles de tierra donde se encontraban las víctimas, identificadas como Yanet Saavedra (19) y su madre Edith Nancy Roldán (36).
Según las fuentes, un llamado al 911 alertó a la Policía sobre un conflicto familiar en el lugar, por lo que los efectivos de la comisaría 6ta. de Florencio Varela se trasladaron hasta la casa en la que hallaron a Yanet muerta de varias puñaladas en la zona del cuello y a Edith herida en el abdomen y el rostro.
La causa, caratulada como “femicidio seguido de homicidio en grado de tentativa”, está en manos del Juzgado de Garantías N°6 de Florencio Varela, a cargo de Diego Agüero, detallaron fuentes judiciales.
Desde el jueves, efectivos de la Policía Bonaerense llevan adelante una intensa búsqueda y solicitan la colaboración de la comunidad para obtener información que pueda ayudar a dar con el paradero del sospechoso, que aún se mantiene fugitivo.
Los vecinos informaron que Saavedra, padre de 11 hijos, solía desplazarse en un carro por la zona de Ingeniero Allan. Para colaborar en la búsqueda, los residentes lo rastrean en motocicletas y vehículos por todo el barrio y sus alrededores, incluyendo el Parque Pereyra Iraola.
Días atrás, Patricia, madre de Edith y abuela de Yaneth, contó en diálogo con Crónica TV que el agresor escapó de la escena del crimen “antes de que llegara el patrullero”.
“Me la mató el hijo de mil p… del padrastro, un chabón drogadicto, borracho, haragán, de todo; él nunca quiso a la piba”, dijo la mujer. A su vez, Patricia defendió a su hija y a su nieta, y aclaró que “ninguna de las dos consumía drogas, alcohol o solían estar fuera de casa por la noche”.
Según su testimonio, el sospechoso mantenía aislada a Edith, e incluso aseguró que cuando los familiares la visitaban, “él ejercía un control excesivo” sobre ella.
