El próximo será un partido duro, ellos vienen de ganarle a Platense de visitante y buscarán hacerse fuertes de local. El Halcón, tratará de conseguir su tercera victoria de manera consecutiva.
Por Guido Cichello .-Tras un flojo arranque de torneo, con derrota ante Newell´s y empate de local frente a Racing, el equipo de Beccacece recuperó la memoria y le ganó de visitante a San Lorenzo y en casa a Gimnasia. Ahora el gran objetivo es vencer al Taladro a domicilio el próximo domingo a las 17.10. Ellos vienen de ganarle 1 a 0 a Platense en Saavedra y quedaron como únicos punteros con 8 unidades, tras dos victorias y dos empates. Defensa vienen el lote de atrás con 7 puntos junto a River Plate, Platense, Unión, Argentinos Juniors y Sarmiento. Una victoria le podría dar al equipo de Beccacece la posibilidad de ir despegándose de ese lote. En cuanto al posible equipo aún el DT no dio pistas pero no variaría demasiado. La duda pasa por incluir a Raúl Loaiza o Gabriel Hachen. Teniendo en cuenta el poderío del rival en esa zona del campo, sobre todo con Giuliano Galoppo, puede que el colombiano tenga una luz de ventaja sobre Hachen. Así todo, Beccacece tiene bien estudiado al rival y optará por la mejor opción. En todo caso ese sería el único cambio si así el DT lo dispone. El arquero será Ezequiel Unsain, la línea de 4 defensores estará compuesta con Nicolás Tripichio por derecha, Adonis Frías y Nazareno Colombo serán los centrales y Alexis Soto el lateral izquierdo. En la mitad de cancha, Kevin Gutiérrez, la duda, Hachen o Loaiza y arriba, Francisco Pizzni por derecha, Carlos Rontondi por izquierda, Walter Bou como falso nueve y Miguel Merentiel de delantero centro. Los duelos en ataque y defensa con los extremos y los laterales serán determinantes, así como también entre Galoppo y Gutiérrez o Bou con Domingo. Allí estarán las claves del partido y tanto Beccacece como Dabove lo saben muy bien. Será un partido abierto, con muchos duelos personales en toda la cancha, quien esté mejor, se quedará con el encuentro. Defensa tiene más volumen de juego y un estilo más definido que Banfield, pero ellos trabajan bien la pelota parada, pueden jugar ofensivo o defensivo, cambiando esquemas durante el mismo encuentro. Será como un partido de ajedrez entre dos entrenadores muy capaces que buscarán quedarse con el partido y los tres puntos. La presión de la gente de Banfield, también puede jugar un papel clave.