No fue fácil ensamblar un plantel, sin embargo, los buenos resultados de final de torneo encausaron la campaña y Defensa tendrá triple competencia por 7mo año.
Por Guido Cichello
Lo de Defensa y Justicia no es casualidad, es una causalidad de aciertos en toma de decisiones de sus di-rigentes y cuerpo técnicos de turno. Luego del gran 2021, con Copas internacionales in-cluidas, el Halcón tuvo que renovar su plantilla. Lo más fácil hubiese sido en el receso de fin de año del 2021, pero Beccacece puso a la dirigencia entre la espada y la pared exponiendo su renuncia sino le mantenían el equipo titular. El club hizo el esfuerzo, se endeudó y apostó 6 meses más al proyecto deportivo, lo que no había hecho nunca. La campaña no fue buena, Defensa no clasificó en la Su-damericana y quedó lejos de la lucha por el campeonato, a pesar de que algunos buenos resultados lo mantuvieron expectante al ingresar entre los primeros 4 de su zona. Sin Sudamericana y con la eliminación de la Copa Ar-gentina había que afrontar la segunda parte del año con un plantel totalmente nuevo y sin tiempo de preparación. Al terminar el torneo en octubre, no se podía hacer pretemporada. Ahí comenzaron los roces entre Beccacece y la dirigencia, asi como también con los jugadores. Los resultados no llegaban, el DT no encontraba el equipo, y De-fensa perdía más de lo que ganaba. El entrenador anunciaba que se iba a final de tor-neo, pero prefirió descomprimir la situación y se fue 9 jornadas antes. Nicolás Diez se hizo cargo interinamente te-niendo el privilegio de obtener dos victorias, una de local an-te Argentinos por 2 a 1 y la otra de visitante frente a Es-tudiantes de La Plata, dos partidos complejos. Luego agarró Vaccari y tras una se-rie de empates seguidos, el equipo empezó a ganar, obteniendo así la clasificación a la próxima Copa Sudamerica-na. Hubo rendimientos su-perlativos en jugadores que no eran tenidos en cuenta por Beccacece, Julio López como volante central, Manu Duarte se ganó la titularidad, Alaniz ganó en confianza y fue figura, lo mismo para Andrés Ríos y Uvita Fernández. Tam-bién Tomás Galván aparecía con más minutos. Ahora la base del equipo está, sólo res-ta saber quiénes no seguirán para poder reforzar esos puestos. Llegaría un lateral derecho, otro izquierdo, un volante central, un volante creativo y un delantero centro de área goleador que compita con Ríos y Fernández. El res-to estaría armado y el DT está conforme con el material que tiene. No será un primer se-mestre de año fácil, con mu-cha competencia. Otra de las prioridades es darle lugar a los pibes del club, de a poco van apareciendo varios. Des-de hace años Defensa apuesta mucho a sus juveniles de La Capilla, y de a poco, se van ganando un lugar.