El primer día en la edición 2023 de una celebración icónica en el distrito reunió a diez mil concurrentes que saborearon frutillas en múltiples variantes según la exigencia y la curiosidad de los paladares: licuados, tartas, budines, brownies, tortas, helado, mousse, licores, dulces, mermeladas, conservas o postres. Cabe consignar que la segunda fecha prevista, para ayer, se suspendió por el mal tiempo que reinó hasta pasado el mediodía.
«Florencio Varela siempre tuvo muchas cosas hermosas para mostrar y esta festividad fue una forma de exhibirlas. Una iniciativa que visibilizó la calidad de las elaboraciones en el cordón agrícola del partido, pero también las opciones artísticas, turísticas, culturales», afirmó el intendente -Andrés Watson- al culminar su itinerario en el predio.

El jefe comunal valoró «la recuperación de un ámbito donde socializar una costumbre varelense, muy arraigada en la identidad de la ciudadanía, como un estímulo al sector manufacturero al incorporar un punto de comercialización y una alternativa gratuita para pasear en familia».
Junto a su esposa -Mariana Bruzzone- Watson caminó entre los stands, conversó con sus responsables sobre la dinámica del evento y dialogó con ciudadanos, ciudadanas que convirtieron el último sábado del mes en un momento de desconexión en contacto con la naturaleza, informó un parte de prensa municipal.
«¡Mucho movimiento!», expresó Eva, integrante en la Asociación Hortícola de la 1610, tras entregar las bolsas de una compra. «Un éxito en las ventas. Agotamos todo el stock que trajimos por la frescura, la textura, el color y el sabor de los cultivos», detalló la mujer.
El grupo tropical «De Fusión Santafesina» interpreto distintos temas sobre el escenario.