Carlos Alberto Farías, un chofer de una línea de colectivos del sur bonaerense y experto en kick boxing, fue detenido ayer por el crimen de Mariano Benjamín Carrizo (49), el hombre al que golpeó tras una discusión de tránsito en Florencio Varela y que murió luego de 18 días de agonía, informo el portal de Infobae, sobre el suceso publicado días pasados por VaD
El violento episodio ocurrió a principio del mes pasado. Farías ya había sido aprehendido, aunque luego, el Juzgado de Garantías N°8 de Quilmes le concedió la excarcelación bajo caución juratoria en el marco de una causa que había sido calificada inicialmente por lesiones graves.
Sin embargo, a partir de los resultados finales de la autopsia y de nuevos testimonios que se incorporaron, el expediente fue recaratulado como homicidio simple. Así, ayer por la tarde, efectivos de la Comisaría 1° de Florencio Varela arrestaron al acusado en su casa de Florencio Varela.
Todo comenzó el 7 de marzo. Ese día, Carrizo viajaba en auto junto a su pareja y a sus dos hijos rumbo a la casa de un familiar. Iban a celebrar un cumpleaños, pero en el camino, a la altura del cruce de las calles Aristóbulo del Valle y Batalla de Ituzaingó, tuvieron un altercado con los ocupantes de un Renault Clio debido a una supuesta mala maniobra al intentar doblar en una esquina.
Lo que parecía una discusión de tránsito más terminó minutos después en un enfrentamiento fatal. Es que, tras el entredicho inicial, los ocupantes del Clio siguieron, entre insultos, a los Carrizo durante cerca de un kilómetro y medio hasta la esquina de Adolfo Alsina y Montevideo, en Villa Vatteone. El hijo mayor de la víctima, Elías, relató que allí el otro vehículo les cortó el paso: “Vino el auto a toda velocidad, nos cruzan y bajan los cinco a golpearnos. No nos dieron tiempo a discutir porque empezaron a pegar”.
Carrizo resultó gravemente herido. Fue trasladado al hospital Mi Pueblo de Berazategui y, posteriormente, derivado al Hospital Bicentenario de Esteban Echeverría, donde murió el 25 de marzo.
La investigación quedó en manos de la fiscal Nuria Gutiérrez, titular de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) N°4 de Florencio Varela. Parte de la pelea fue registrada por un testigo con un celular. En las imágenes se observa a Farías golpear a Carrizo pero no se alcanza a ver el desenlace. El hecho ocurrió debajo del domo municipal y por el momento no hay otras filmaciones disponibles. Se averigua si algún vecino de la zona pudiera tener otra.
Inicialmente, por los dichos de un testigo, de la causa se desprendía que la víctima había recibido un solo golpe en el rostro y que, cuando cayó, impactó su cabeza contra el cordón de la vereda y se desvaneció. Pero la autopsia reveló que la agresión había sido mayor.
El análisis forense concluyó que Carrizo murió a raíz de un traumatismo encefalocraneano grave. “Concretamente, tenía dos fracturas que son mortales, más allá de que eso depende de la evolución del paciente. Una en la región occipital y otra en el techo de la órbita. Esto acredita la existencia de varios golpes: el traumatismo encefalocraneano fue provocado por una combinación de golpes violentos en la cabeza”, detallaron fuentes del caso en diálogo con Infobae.
A esto se le sumaron los testimonios de los familiares de la víctima, que apuntaron contra la ferocidad con la que actuó el colectivero. Los investigadores constataron que Farías practicaba artes marciales, tal cual habían remarcado los Carrizo. Incluso, se conoció que tiene una bolsa de boxeo en su domicilio. “Fue una pelea desigual. (Farías) Es una persona que está preparada para pelear, que tiene conocimiento y los golpes que le dio a Carrizo fueron a la cabeza”, señalaron las fuentes.
Con estas pruebas, la fiscal Gutiérrez decidió recalificar el expediente, pedir la detención de Farías e imputarlo por homicidio simple. Había considerado también la posibilidad de que el hecho se encuadrase bajo la figura de un homicidio preterintencional, en el que el agresor tiene intención de lesionar pero no de causar la muerte de la víctima.