Costó más de lo esperado, pero finalmente Defensa y Justicia venció 1 a 0 a Centro Español y pasó de ronda en la Copa Argentina. Ahora por los 4tos de final espera por el ganador de Banfield o Estudiantes de Río Cuarto.

Por Guido Cichello.En la previa el partido se presentaba accesible, cuatro categorías de diferencia entre uno y otro equipo, marcaban la responsabilidad que debía asumir el Halcón para quedarse con la clasificación. Pero en el primer tiempo del partido, pasó lo que sucede en muchas oportunidades, Centro Español haciendo tiempo, siendo inteligente, mordiendo en todos los sectores del campo y jugando el partido como una verdadera final. Por su parte los de Vaccari, no estuvieron precisos, le costó ganar en el uno contra uno y generar situaciones claras de gol. Los minutos pasaban y la desesperación crecía. Para colmo, Nazareno Colombo se lesionó la rodilla y era una preocupación importante para todo el mundo Halcón, sin dudas el defensor es pieza clave para el equipo. Para el segundo tiempo Defensa y Justicia debía emparejar con la actitud pero sobre todo, con fútbol y juego asociado, algo que no tuvo en la primera mitad. En el segundo tiempo Vaccari metió mano en el equipo, entendió por dónde estaban las falencias y acertó. Ingresaron Tomás Escalante por Julián López quien se mostraba muy estático y Cáceres entró por Soto quien había estado cerca de ser expulsado en el primer tiempo. Ellos le cambiaron el aire al equipo, sumado a que el rival mermó su nivel por cansancio físico. La diferencia de categoría se notó más por lo físico que por lo futbolístico. No fue un partido fácil para Defensa y Justicia que si bien dominó todo el segundo tiempo, el primero había sido muy parejo.

El gol de Bogarín a los 12 minutos del complemento simplificó todo para los de Varela. El equipo ganó en confianza y controló aún más la pelota. Ellos casi no generaron peligro en el segundo tiempo y menos aún cuando se quedaron con un hombre menos a falta de 20 minutos para terminar el juego. Defensa sostuvo la pelota, ellos corrían tras ella y sólo un par de situaciones claras de gol fueron lo que arrojó el partido en el final. Uvita Fernández y Togni tuvieron una por lado, pero no pudieron convertir. Defensa ganó un partido chivo, que en la previa se presentaba accesible, pero que en los papeles fue todo lo contrario. No se notaron las 4 categorías de diferencia entre uno y otro. Hay cosas por corregir, pero lo importante es que se ganó, se pasó de ronda y ahora el equipo está en los cuartos de final, esa bendita instancia que nunca pudo pasar el Halcón de Varela. La oportunidad es importante, ahora se viene Banfield o Estudiantes de Rio Cuarto, dos rivales difíciles pero por la realidad de ambos, es Defensa quien corre como favorito. La Copa Argentina es un torneo complicado, y nunca hay que dar por ganado ningún encuentro, quedó demostrado ayer en La Plata. Ahora la cabeza tendrá que ponerse en el torneo local y el partido del próximo domingo a las 18 ante Sarmiento en el Tito Tomaghello. Hay que ganar si o si para no perder pisada de los puestos de arriba soñando con las copas internacionales versión 2024.