Tras la publicación del Decreto de Necesidad y Urgencia que redactó el gobierno de Javier Milei, la Ley de Tarjetas de Crédito sufrió algunas modificaciones. Los precios que suben casi a diario, la inflación que no para de crecer, no llegar a fin de mes con el sueldo y los gastos son cada vez más grandes. Teniendo que financiar alimentos, medicamentos, vestimenta, el alquiler o las expensas, algún gasto extraordinario o el pago de la misma tarjeta. Muchos se ven obligados a pagar el mínimo del resumen mensual. Ese ejercicio que es desaconsejable siempre, desde ahora será aún más caro y hará a la deuda algo difícil de remontar. Milei elimino varios topes: uno de ellos, es la tasa que se le cobra a los comercios (del 3% en caso de las tarjetas de crédito y 1,5% de las de débito), y los intereses punitorios que se le podrán cobrar a los clientes por falta de pago. Además, se derogan las sanciones a empresas que no informen la tasa de interés.
Esos intereses representaban hasta ahora una tasa de 122% anual (es decir un 11% mensual); tras la liberación son más costosos y podría significar hasta un 400% anual. El Banco Central oficializó el nuevo valor de la tasa de interés que se aplicará a las operaciones de crédito para enero. Esta será del 140,86% nominal anual, que surge del promedio de las tasas que cobran los bancos por préstamos personales, y a partir de la cual los plásticos pueden sumar hasta un 25% por encima de ese nivel, es decir hasta un 176 por ciento.
« La guita no alcanza” y hay un problema social muy grave y que se acrecienta día a día. Los sectores medios que no pueden literalmente satisfacer sus necesidades básicas y los sectores de bajos ingresos por supuesto padecen muchísimo más. Porque pedirle a la gente que no coma para terminar con la inflación, es inhumano y esperable que en el corto plazo una fracción muy importante de la clase media caiga por debajo de la línea de pobreza. Cuando la compra se realice con tarjeta ¡Cuidado! Milei provocó una fuerte suba del costo financiero en los pagos con tarjetas de crédito.
Mario Carrera