Al cabo de nueve horas de sesión, el proyecto se aprobó con 56 votos positivos, 13 negativos y 3 abstenciones. Juntos por el Cambio unificó su postura a favor del acuerdo, y el Frente de Todos votó dividido.
La Cámara de senadores sancionó anoche la ley que avala el acuerdo con el FMI firmado por Alberto Fernández, con respaldo casi unánime de la oposición pero con sólo 20 de 35 oficialistas por la resistencia del kirchnerismo. Cristina Kirchner no presenció la votación y casi no estuvo: abrió la sesión, se fue a los 20 minutos, volvió a las 5 horas por un lapso similar.
La ley autoriza el acuerdo de facilidades extendidas, una refinanciación de la deuda por 44.700 millones de dólares que tomó Macri en 2018 y que este año y el que viene acumulaba vencimientos anuales por casi 20 mil millones de dólares. El Fondo los cancelará con Derechos Especiales de Giro (DEG), su moneda oficial, y Argentina devolverá el préstamo entre 2026 y 2034. El Directorio del organismo lo aprobará en las próximas horas.
«No escuché ningún gobernador que se opusiera a este acuerdo», justificó su respaldo José Mayans, el jefe del oficialismo, en su discurso de cierre, abocado casi en su totalidad a cuestionar la gestión de Mauricio Macri.
«Acá confrontan dos modelos», minimizó el consenso y recordó que en una charla que tuvo con Cristina Kirchner antes de asumir como jefe de bloque, le dijo que el endeudamiento heredado del gobierno de Macri «no se iba a poder resolver».
La vicepresidenta volvió a mostrar su músculo en la interna del Gobierno: como había ocurrido en Diputados, logró más rechazos de los esperados, casi partiendo el bloque a la mitad. No le fallaron los senadores de La Cámpora, pero tampoco quienes la acompañaron en su bloque hasta 2019 o incondicionales de siempre como Oscar Parrilli y Juliana Di Tullio.
Las presiones de la Casa Rosada no lograron sumar a más senadores propios que los aportados por los gobernadores. Cristina reunió a La Cámpora y a sus incondicionales de siempre. Juntos por el Cambio garantizó la ley.
Los intentos de la Casa Rosada por sumar más votos propios fracasaron y los votos positivos terminaron reducidos a los empleados de los gobernadores. Juntos por el Cambio aportó sus 33 votos y la única abstención opositora fue la de la neuquina Lucila Crexell, habitual aliada de la oposición.
Los trece votos en contra fueron de los camporistas Mariano Recalde, María Eugenia Duré, Anabel Fernández Sagasti y Matías Rodríguez; los ultrakirchneristas Oscar Parrilli y Juliana Di Tullio; además de los puntanos María Eugenia Catalfamo y Adolfo Rodríguez Saá, el rionegrino Claudio Doñate, la salteña Nora del Valle Giménez, la santacruceña Ana María Ianni; la chaqueña María Inés Pilatti Vergara y el jujeño Guillermo Snopek.
Con apoyo opositor y sin Cristina Kirchner en el recinto, el Senado convirtió en ley el acuerdo del Gobierno con el FMI
18/03/2022