Se trata de un matrimonio mayor del barrio Zeballos. Buscaban un celular y un reloj Casio robado a un hincha en la Cancha de Defensa y Justicia. La policía admitió que se hizo una mala inteligencia. Fueron 7 los domicilios allanados con destrozos en sus puertas de ingreso.
Al tiempo que ayer ocho policías de la Ciudad de Buenos Aires detuvieron a un en enajenado a los sillazos, por no utilizar las tonfas y terminar por perder el trabajo, ante la intervención de los Derechos Humanos, en Florencio Varela se realizaron 7 allanamientos en conjunto con la finalidad de secuestrar un celular Samsung y y reloj Casio robado a un simpatizante en la cancha de Defensa y Justicia. Lo paradójico y lamentable, a la vez, es que para cumplimentar el requerimiento judicial destrozaron las puertas de ingresos a los domicilios con el fin de ingresar por la fuerza.
Victor Itati Chamorro tiene 73 años y vive en una casita del complejo de viviendas de Zeballos, con su esposa Patricia, empleada municipal del área de asistencia a la víctima de la Municipalidad de Florencio Varela. Ayer en horas de la tarde el matrimonio fue sorprendido por una brigada del Grupo de Apoyo Departamental de la Policía de la Provincia de Buenos Aires que a los golpeas con un “torpedo” de hierro destrozaron la puerta de ingreso a su vivienda, de la calle 214 Bis, numeral 1731 de Zeballos. Chamorro, quien el año pasado sufriera un infarto, salió al patio de la casa en calzoncillos y remera. De inmediato fue obligado a tirarse el suelo mientras un uniformado colocó su arma reglamentaria en su nuca al tiempo que le gritaba “Donde está Caras, donde está Caras”
Chamorro pudo saber más tarde que el tal “Caras” es un barra de Defensa y Justicia sindicado como el autor del robo de un celular Samsung y el reloj Casio que buscaban los uniformados por orden del titular de la Fiscalía Nº1 de Florencio Varela, doctor Darío Provisionato, en el marco de la Investigación Preparatoria Nº 13-02-003291-23/00. Eso pudo conocer Chamorro en la orden de allanamiento autorizada por el Juez de Garantías Nº 5 de Florencio Varela, doctor Julián Busteros, el mismo que investiga el crimen de Lautaro Morello y la desaparición de Lucas Escalante.
El momento que vivió la familia Chamarro fue horrible. “Podría habré muerto en el piso si me agarraba otro infarto”, dijo a Varela al Día el ex concejal mientras se lamentaba de los destrozos.
“Mi esposa trabaja en la Dirección de Asistencia a la Victima y les pidió por favor a los policías que la dejaran hablar por celular con el jefe de la Estación de Policía, para explicarle que se trataba de un error. No lo permitieron y revolvieron la casa buscando el celular y el reloj, mientras preguntaban por Caras”, dijo Chamarro y agregó: “Cuando se fueron dijeron que podría haber un error. A la noche mi esposa habló con el Jefe de Estación quien mando al comisario de la Primera. El policía nos dijo que hubo un error en la inteligencia, porque se hizo en 48 horas y que les dijeron que a mi casa entraban barras bravas de Defensa y Justicia. Les ofrecimos las cámaras que tengo. Que vean las filmaciones. Dijeron que no. Se equivocaron de casa, nos dijo el comisario y nos dejó un patrullero en la puerta de casa hasta que a la tarde (de hoy viernes 17) pueda enviar un herrero para arreglar la puerta de casa. Yo creo que la puerta no sirve más. Esto no se arregla con una soldadura”, cerró el indignado vecino y ex concejal en los años noventa del peronismo varelense.
Fueron siete allanamientos ordenados por la justicia y con la inteligencia de policías de la Comisaria Primera para ubicar un celular Samsung y un reloj Casio. Puede haber estado el celular en un domicilio y el reloj en el otro, con lo cual hubo 5 puertas de ingreso a domicilios destrozadas. O bien en ningún domicilio apareció lo buscado. ¿En todos fallos la inteligencia? ¿Quién paga los destrozos? ¿Qué tipo de preparación tienen quienes hacen inteligencia sobre domicilios para requerir que se los allane?